EL JUEGO

¡Que ingrato es el recuerdo cuando quiere
jugar como un fantasma al escondite!
Tu cerrando los ojos y contando,
él diciendote adios sin despedirse.
Y por más que lo buscas, los rincones
son obstáculos recios e imposibles,
Tu recorriendo todo y suplicando,
él dejando silencios que te exprimen.
¿No has intentando nunca que volviera
cuando necesitabas ver lo que ya vistes?
Y se esconde tan hondo que no hay forma
de saber donde fué ni lo que hicistes.
El recuerdo que escapa y te aprisiona,
tu quieres que regrese y él sonrie,
"no terminan los juegos si tu quieres,
terminan cuando yo al fín los termine".
¡Que ingrato es el recuerdo cuando quiere
jugar como un fantasma al escondite!
Tu cerrando los ojos y contando,
él diciendote adios, sin despedirse.