Hoy ni siquiera sé si tengo ganas de pensar nada.
Creo que cada dia que pasa me encuentro mas perdida en mis propios miedos, en mis propias penas y en el convencimiento de que nunca va a volver.
Y me duele. Pero más que el echo de que se haya ido me duele el que no me haya dicho el porqué.
Supongo que es dificil saber que no vas a volver a ver a alguién con quién eras feliz, pero la peor carga es desconocer sus motivos.Si la última vez que hablasteis el se encontraba bien, estaba contento y te dijo que hablariais al dia siguiente, no se entiende de repente que todo se convierta en silencio.
Y creo que tengo miedo.Miedo de que le haya sucedido algo, miedo de estar pensando que ese silencio lo provoca el por una causa que no comprendes y que la realidad sea que hay algo que le impide hablarte.
Sé que puede parecer exagerado, pero no puedo evitar pensar que pasaría si la realidad no fuera que se ha ido porque deseaba hacerlo sino que algo a ocurrido que le ha hecho daño.
No puedo evitar pensar que puede haber tenido un accidente, o haberse puesto enfermo,o que alguién puede haberse metido con él.
Sí, se que puede parecer que soy demasiado dramática....pero estoy segura conociendole un poco que en circunstancias normales nunca se habría ido sin decirme los motivos, porque siempre los decía, supiera que te gustaban o no, pero le costaba callarse.
Si tan solo me dejara un mensaje para decirme que está bien me conformaría.
No necesito una explicación, no necesito que me de motivos para dejar de hablarme, pero creo que necesito saber que se encuentra bién.
Creo que prefiero saber que simplemente no le importo antes que pensar que pueda haberle sucedido algo grave.
Y creo que ahora mismo es la incertidumbre lo que me está matando por dentro.No es el dolor por saber que no puedo verle ni hablarle, aunque eso sea muy duro, sino el miedo de que no esté bién.
No sé si puedo hablar con Dios puesto que ni siquiera sé si existe realmente, pero si en algún lugar donde esté puede escucharme solo le pediria que me dijera que se encuentra bién, nada más, pero sí que no le ha pasado nada.
Y el problema es que no conozco a nadie más en zaragoza.Nadie que pueda decirme como se encuentra, nadie que pueda tranquilizarme con respecto a él.
Y así es dificil vivir. La subida se hace demasiado empinada y cuesta controlar los pasos que debes dar; y el miedo es demasiado grande para seguir sin mirar atrás.
Así que mi súplica esta noche se dirije a Dios, donde se encuentre, para que si no va a devolvermelo al menos me mandé alguna señal de que donde quiera que esté no le ha ocurrido nada.
Creo que no quiero nada más....pero necesito saberlo, solo saber como se encuentra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario