Para ti, por ti y en ti,
compartido en el silencio,
adorado en la derrota
y buscado en la distancia.
Para ti que eres espuma
y caracola de nieve,
humo en el blanco del cielo
contra la luz de una estrella.
Pasajero de la nada,
capitán de lo imposible,
efímero en la existencia
de las horas que eternizan.
Para ti que vives dentro
del corazón que te añora,
de la mirada que busca,
de la voz que te enmudece.
Desafío en lo improbable
de una batalla perdida,
el deseo más pedido
a ese Dios que es implacable.
Para ti que sin matarme
has conseguido que muera,
que te convertiste en lágrima
en el calor de mis ojos.
Que te aprietas en mi pecho
ajeno a que agonizando
se rompe, con el silencio
y sufre con la distancia.
Para ti que me destruyes
con la luz de tu recuerdo.
para mí que me destruyo
con este dolor que rasga.
Para ti, por ti y en ti
que eres un sueño imposible
que no puede despertarse
para dejar de soñarlo.
Para ti cada palabra,
en ti cada pensamiento....
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