Abrimos y cerramos
las puertas del infierno,
cada rincón oscuro
que vibra más allá,
jugamos a los juegos
prohibidos por el tiempo,
queremos ser y somos
dormida humanidad.
No existen prohibiciones,
no existen ya barreras,
nuestros cuerpos son almas
en mutua gravedad,
lo bueno se hizo malo
lo malo se hizo bueno
y en medio de este grito
amamos sin piedad.
Ni Sodoma y Gomorra
ni Infernos indecisos,
campos de refugiados
fundidos en calor,
hicimos de esta vida
solo un lugar de paso
donde tan solo importa
lo que hay alrededor.
Abrimos y cerramos
las puertas del infierno,
Caronte es nuestro guía
en esta ingratitud,
hicimos del futuro
un negro compromiso,
y en medio de este mundo
tan solo existes...tu.
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