REENCUENTRO.

Y entraste por la puerta cual alma huracanada
haciendo que estallaran en mil, los sentimientos,
llevándote a tu paso distancias y palabras,
con el frescor divino de un amor por sustento.
Llenaba tu presencia los frescos dibujados,
las ventanas abiertas que esperaban los vientos,
cada rincón dormido arropado en la bruma
y las puertas cerradas que se fueron abriendo.
Fue tu aroma perdido el que ayer olvidado
despertó lentamente cada poro que abierto
quería recibirte, como recibe el alma,
la música que suena en medio del silencio.
Fuiste la furia ciega que rompió lo perdido,
que mató la distancia abrazada con miedo,
el susurro que a voces despertó lo dormido
y sació con sus besos mis dormidos anhelos.
Tanto tiempo esperando con vestido de ausencia,
con lágrimas guardadas bajo llave en silencio,
esperando el momento de tenerte a mi lado,
esperando tan solo tu llegada de nuevo.
Y por fin despertaste de tu sueño lejano
para volver conmigo aunque fuera un momento,
mientras una sonrisa se prendía en mis labios
y en los tuyos sonaba un "mamá" lisonjero.
De nuevo bailo sola al calor de la brisa,
mientras en mi cabeza se concibe el encuentro
en que tú, sonriente, volverás a mi lado,
mientras yo, resignada, como al alba... te espero.