
cinco años ya desde que te fueras,
y todavía cada noche
cierro los ojos y veo tu rostro,
tus ojos azules, tu pelo rizado,
recuerdo tu sonrisa....
Tu voz sigue sirviéndome de guía,
y tus pasos me llevan nuevamente,
te veo mirarme y sonreir,
y creo que vas a aparecer en un momento.
No fué justa la vida con tu marcha,
te arrebató sin avisar siquiera,
un pequeño dolor, un preaviso,
de que todo acababa.
Pero sigues aquí, sin estar nunca
no fuistes capaz de marcharte del todo,
dejastes tanto, te llevastes tanto,
pero no pudistes arrebatar tu esencia.
Y de nuevo vienes a buscarme
para hacerme sentir tu compañía,
a pasado el tiempo, sí,
pero de alguna manera el tiempo no pasa
porque tu no te has ido.
Me gustaría volver a escucharte
aunque solo fuera un pequeño momento,
tener el privilegio de caminar contigo
como lo hicimos entonces,
y volver a encenderme mientras finjo
que no te veo mirarme de reojo
y bajar la mirada.
Han pasado los años, pero amigo,
sigues siendo mi luz en el camino,
y yo sigo pensando que fué hermoso
el privilegio de haberte encontrado,
y haber compartido tus secretos
en noches calladas.
Teníamos pendiente aquel viaje,
puede que algún día podamos hacerlo,
no te preocupes, esperamé y piensa
que tal vez solo debamos cambiar el destino
porque tu seguiras cerca, aquí conmigo,
hasta el día que volvamos a encontrarnos.
Tuvimos algo hermoso y lo perdimos
porque tu te marchaste una mañana,
demasiado pronto para despedidas
que nunca serán eternas,
si existe un" para siempre" no será el del adios,
será el de estar juntos frente a esta distancia,
mientras que eternamente vivas en mi recuerdo.
QUE SEPAS QUE TE QUIERO.
1 comentario:
¡Que bonitooooo! me ha encantado, tanto que no sé que comentarte porque ya lo has dicho todo en tu texto. Un beso Laura y espero que pronto os volvais a encontrar. Muaaah
Publicar un comentario