viernes, 12 de septiembre de 2008

Es la vida, lo juro,
un gran sainete.
Una tragicomedia
en cuatro actos,
con actores sin nombre
en los papeles,
de los guapos, los feos,
y los sabios.

Y al final solo espera
la fria muerte,
que en esta obra no existen
los aplausos,
y de cada persona
que interpreta
una canción y un trozo
de escenario.

De los buenos, baladas,
suenan siempre,
y suenan a rock duro
de los malos,
y de los que sufrieron
se desgarran
al fondo los acordes
de los fados.

Es la vida señores
opereta,
una obra en que el libreto
nos hes dado,
en el momento mismo que venimos
y ante todos nuestro telón alzamos.

Y mientras con acorde
y sonrientes,
mejor o peor papel
interpretamos
nos vamos convirtiendo
en una parte
de aquella obra sin fin
que imaginamos.

Pero llegará el dia
en que a deshora,
nuestro papel acabe
y nos vayamos,
entonces miraremos
a las gradas
y alguién aplaudira
timido encanto.

La vida es un sainete.
es la farándula,
el espectaculo, la luz,
solo teatro,
nosotros simplemente
los actores
de la obra que escribio
un autor cansado.

Así que cuando veas
que se baja
ese telón que un dia
viste alzado,
saluda, manda besos
y recuerda,
que tu papel por hoy
se ha terminado.

2 comentarios:

Estoicolgado dijo...

en esta te cobran al salir

de la función

Laura dijo...

No siempre te cobran, lo triste es no escuchar ningún aplauso y saber que interpretastes un papel que no interesó a nadie.

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