Volver atrás

Creo que la vida debería darnos la oportunidad de poder hacerlo al menos una vez.
Y darnos esa oportunidad aunque solo fuera por un pequeño lapso de tiempo.
No me refiero a volver a vivir nuestra vida, porque para bién o para mal lo que hemos vivido es lo que nos ha hecho como personas.
Pero sí darnos la oportunidad de intentar subsanar nuestros errores.
La oportunidad de pedir perdón si alguna vez aunque fuera sin querer a alguién le hicimos daño.
De corregir aquello que no supimos hacer bien.
Debería ponernos de nuevo delante de todas esas personas a las que querriamos explicarles algo y nunca lo hicimos.
Y también darnos la oportunidad de entregar eso que quisimos dar y no dimos.
De sonreir a quién no le entregamos una sonrisa aunque desearamos hacerlo.
Dicen que olvidar es de sabios y perdonar de valientes.
Pues tal vez la vida alguna vez debería perdonarnos a nosotros también.
Y dejarnos desandar un poco el camino para intentar cojer la senda correcta.
No es bueno mirar atrás y ver todo lo que hemos perdido, lo que hemos olvidado, y saber que es imposible recuperarlo.
No es bueno pensar que cada minuto del dia estamos sometidos a un examen, tenemos que tomar una decisión, y que solo tenemos una oportunidad, y que si fallamos, eso será lo que quede de nosotros.
Como tampoco lo es pensar que en cada paso que damos podemos dejar una huella, una flor prendida en el corazón de alguién, pero que será la única flor que podremos regalar porque no tendremos la oportunidad de entregar otra.
Sé que volver atrás es imposible.
Que nadie puede volver a beber del agua que ya ha bebido.
Que nunca volverá a pasar sobre tu cabeza esa estrella que pasó una vez.
Sé que la vida consiste simplemente en eso.
En ir siempre hacia adelante y no volver la cabeza para no convertirnos en estatuas de sal.
Pero creo que alguna vez deberiamos tener esa pequeña oportunidad.
La oportunidad de dar la vuelta a nuestra barca y volver al puerto de donde salimos.
La oportunidad de volver a sentir el roce de la misma brisa que un dia nos hizo estremecernos mientras contemplábamos todo lo que nos quedaba por recorrer.
Tal vez así pudieramos seguir caminando con más fuerza de la que teniamos antes.
¿Sabes Ale? puede que alguna vez si podamos explicar a que huelen las cosas, o a que saben....
pero lo triste es pensar que huelan a lo que huelan o sepan a lo que sepan, puede que una vez que hayamos encontrado su olor o su sabor, nuestro destino sea abandonarlas para seguir.
Y seguiremos sabiendo que habrá nuevos olores o nuevos sabores.
Pero tal vez la vida debería dejarnos saborear los mismos durante un nuevo instante.
Y luego permitirnos dejarlos donde estaban sabiendo que si los necesitamos podremos dar la vuelta y volver para recuperarlos.