domingo, 2 de diciembre de 2007

la identidad del espíritu

O tal vez debería decir la identidad de mí espíritu.
Ese que hoy vaga sin saber quién es.
Ese que perdió, gano y volvió a ganar para perder de nuevo.
No sé si los demás podrán entenderme, pero espero que tu lo hagas.
Que entiendas porqué para mí es tan triste este fín de semana.
Creo que te dije que había tenido que decir adios a alguién especial.
Y es una persona especial de verdad.
Se llama Paco ¿sabes?
Y no era mi novio, ni mi amante, ni mi pareja....era mi amigo, es mi amigo y una persona tan maravillosa que creo que seguramente poca gente tendrá la suerte que he tenido yo de encontrar alguién como él en su camino.
Pero me temo que al igual que yo, él también tiene algunos problemas, o una situación distinta que le crea algunos problemas y eso hace que haya construido un muro a su alrededor para protejerse.
Supongo que todos, cuando tenemos miedo de que nos hagan daño, nos atrincheramos y hacemos todo lo posible para evitarlo.
Pero yo ayer lo eché mucho de menos.
Supongo que se iria al cine como todos los sábados o que estaría en casa viendo algún capítulo de start treck.
Y reconozco que ahora mismo daria lo que fuera por que escribiera dos lineas y poder hablar con él.
Hoy tenía ganas de escribirle. De intentar explicarle que para mí es alguién muy importante.
Si es verdad que seguramente yo nunca podré querer a nadie como lo hice una vez, pero eso no significa que no puedas llegar a sentir un cariño inmenso por otras personas, que no puedas llegar a querer a otras personas y que otras personas puedan ser importantes en tu vida.
Y para mí él es una persona muy importante.
Seguramente porque apareció en mi vida cuando yo pensaba que ya nunca podría llegar a ser feliz.
Y sin quererlo, al igual que tú, él me regaló momentos maravillosos.
Simples conversaciones, unas horas para hablar de cosas que seguramente no tenian ninguna trascendencia,pero poco a poco se fué convirtiendo en alguién tan especial que me hizo olvidar que durante un tiempo yo dejé de ser persona.
Y reconozco que con él era feliz.
Me gustaba esperar a que se conectase y me gustaba saber que vendría, que estaría aquí, que podría compartir con él esos pocos minutos que teniamos para hablar.
Y creo que si de algo me arrepiento ahora es de no haber sabido mantener esa amistad.
Es de no haber podido darle lo que él buscaba en mí.
Pero en el fondo yo no soy más que una ruina de persona que destroza todo aquello que tiene cerca porque no sabe aceptar que hay cosas que no vuelven y que debemos darnos otras oportunidades para vivir.
Yo estoy segura de que hay muy poca gente que podría entender esto.
No creo que ni él mismo si se lo explicara pudiera entenderlo.
Pero llegó un momento en que sentí que él ya no me necesitaba; que estaba aquí más por compromiso que por que de verdad quisiera hacerlo.
Y decidí que lo mejor era decirle adios.
No sé si acerté o me equivoqué al hacerlo, pero sé que me dolio tener que escribirle esas cuatro líneas y que me dolerá durante tiempo saber que he perdido un amigo y que no va a volver a conectarse de nuevo.
Sin embargo yo siempre he pensado que las personas deben ser muchas cosas, pero por encima de todo deben ser libres, y que nadie debe empeñarse nunca en intentar mantener a otra persona a su lado cuando ya no quiere hacerlo.
Da igual que sea una pareja, que un amigo, que un conocido....
La gente debe estar siempre donde quiera estar y cuando desee hacerlo.
A pesar de todo reconozco que me duele lo que está ocurriendo.
Y que se me está haciendo duro perder de nuevo a otra persona que me importa, aunque esta vez la perdida sea distinta y sepa que él está perfectamente.
Pero no pierdo la esperanza de que un dia tal vez vuelva a conectarse, y volvamos a ser amigos, y pueda decirle entonces que me importa mucho, a pesar de esas diferencias que él cree ver en sí mismo.
Tal vez pueda pasar o tal vez no, pero me gusta pensar que un dia volveremos a encontrarnos, porque supongo que me niego a creer que lo he perdido del todo.
De todas formas tal vez sea mejor así.
Supongo que él tiene que vivir todavía muchas cosas que yo ya he vivido y que por su edad su sitio puede que nunca estuviera pegado al ordenador hablando con alguién que le saca unos cuantos años.
Supongo que lo estupido al final es pensar que puede haber algo que dure, y más cuando por experiencia sé que en mi vida las cosas buenas (con excepción de mis hijas) nunca han durado demasiado.
Será cosa del destino o será que alguién lo escribió así en las estrellas.
Pero sea cual sea el motivo, la realidad, es que yo debía haber estado preparada para esto y no lo estuve, y ese a sido al final mi error.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Laura,

Mujer no te eches todas las culpas. Vamos por partes.

A ti te parecía que P. estaba ahi por compromiso, pero es realmente así? Se lo has preguntado directamente alguna vez? En ocasiones tenemos razón y en otras nos equivocamos. Hay muchas formas de ver la realidad, te sorprendería.

Si le echas de menos en la forma que sea, porqué no se lo haces saber? Qué tienes que perder?

A veces somos muy complicados, pero el resumen está en las distintas percepciones del mundo, de la realidad. Estoy segura que él también extraña la amiga que había encontrado en ti.

No te preocupes por nada. Y haz lo que te dicte el corazón.

Buenas noches Laura.

Anónimo dijo...

En cuanto a olvidar el pasado, a quién has querido tanto, eso no has de hacerlo nunca. Lo que si tienes que intentar hacer es darte una oportunidad y dársela a otros. Es una pena no hacerlo. Nadie sustituye a nadie, con cada persona que se cruz en nuestra vida tendremos otras experiencias Tenemos que aprender a disfrutar de lo que no dá la vida en ese momento. Todas esas experiencias hacen que seamos las personas que hoy están aqui. Y tu tienes mucho que ofrecer.

Ahora sí, buenas noches e intenta dormir.

Laura dijo...

Puede que tengas razón, pero la realidad es que cuando yo caí en la depresión y me pusé enferma fué muy duro para mí pero también para mi familia y para mis hijas.
Y cuando le encontré a él y me ayudó a salir adelante todo el mundo se sintió mejor al ver como yo volvia a ser la que era.
Y desde que lo perdí, aunque estoy mejor, las cosas no están siendo fáciles.
Puede que por eso me eche la culpa, porque en parte la tengo, porque creo que hay algo que no puedo evitar desde entonces y es tener miedo.
Tengo un miedo terrible a encontrar alguién que me entienda y volver a perderlo y tal vez por eso muchas veces soy yo la que cierra las puertas antes de abrirlas.
Supongo que es paradójico teniendo en cuenta que me encantaría encontrar alguién un dia con quién sentirme feliz de nuevo.
Pero supongo también que no es facil hacer coincidir nuestros deseos con lo que hacemos, o perder nuestros miedos de golpe.
Buenas noches a tí también.

Anónimo dijo...

Tener miedo es algo inherente. Todos lo tenemos, diariamente. Creo que la mejor forma de vencerlo es enfrentarse a él. Y no es fácil, pero al menos cuando lo hacemos lo conocemos y estamos alerta de su existencia y sabemos bailar un tango con él.Fíjate que eso es harto complicado.

Sé que es muy fácil decirlo y muy difícil hacerlo. Sé que ya no somos dueños de nuestra propia vida y que hay personas que dependen de nosotros y tenemos que evitar sufrimientos que se desprendan de nuestros propios actos. Las personas que te quieren también han disfrutado de esos momentos en los que has estado mejor, te han visto brillar y no solamente han visto momentos grises que no son per se malos pero tampoco son excepcionales.

Ojalá encuentres el modo de poder dar un pasito adelante, ojalá puedas ser una pizca más feliz y esa felicidad no la hagas depender de nada, ni de nadie en concreto sino sólo de ti. Y ya verás cómo entonces te sentirás más fuerte. Repito no es fácil y es un largo camino a recorrer, pero tú ya has empezado a andar

Laura dijo...

Yo empiezo a andar muchas veces, pero al final, no sé porqué, siempre termino cayendo de nuevo.
Bueno, en parte sé porqué. Porque me falta esa valentia para dar esos pasos dependiendo solo de mí,como tu dices.
Puede que la comparación no sea la mejor, pero yo siempre digo que nosotros somos un poco como esos animales a los que alguién un dia abandona en una cuneta y otra persona recoje; esos animales están tan necesitados de cariño y tienen tanto miedo de volver a encontrarse en una cuneta de nuevo que se vuelven demasiado dependientes de quién les da una segunda oportunidad.
Pues algo así podría ser.
En el fondo tenemos tanta necesidad de cariño que eso puede con nosotros,nos sentimos demasiado solos, y la soledad es una mala compañera aunque yo intente convencerme de lo contrario, pero por otro lado tenemos un miedo terrible a volver a encontrarnos en una cuneta por no saber satisfacer las espectativas de los demás.
Pero lo que nos es dificil es aprender a caminar solos.
Y tal vez cometemos otro error demasiado grande; disfrazamos nuestros miedos, nuestras angustias y aprendemos a finjir ante los demás, pero cuanto más sonreimos por fuera, más nos destrozamos a nosotros mismos por dentro, porque estamos haciendo algo que no queremos hacer.
Complicado ¿verdad?
Pero yo seguiré intentandolo,por las tres estrellas que tengo en casa y que son mi mejor apoyo cada día.

Anónimo dijo...

Sí eres valiente Laura, sino no estarías aqui escribiendo estas cosas y mirándote desnuda delante del espejo. Creo que hay que empezar por uno mismo y a partir de ahi lo demás vendrá más o menos rodado.

Si nos reímos mientras estamos detrozados por dentro, esa pantomima sólo la vamos a poder mantener en pie durante un periodo de tiempo y después caeremos otra vez. La valentia está en decir y no por ello agobiaremos a los demás, mira, ahora no estoy bien del todo, pero quiero y estoy haciendo cosas para sentirme mejor, para responder a mis expectativas. Entre tus expectativas también estarán algunas de las de tus hijas y las de otras personas seguramente.

Pero te digo por experiencia propia que primero, aunque suene egoista eres tú y después lo demás vendrá rodado. Tú eres el motor de tu familia y si tú no estás bien el barco se hunde. No sé, asi lo veo yo, pero esta es mi filosofia y quizás no sea de aplicación universal.

Laura dijo...

Si mi hija la mayor estuviera aquí en vez de en el instituto me diria que porque no te hago caso.
Anoche me "regañaba" porque como ella dice tu estás ahí y no piensas que sea un bicho raro (aunque también me dijo que ella si lo piensa, porque yo nunca he sido una madre normal),pero dice que tendría que empezar a escucharte.
De todas formas te hice caso y escribí ese mensaje que tenía que haber escrito antes.
Seguramente no lo hubiera echo si no hubiera sido por lo que tu me dijistes,pero creo que me vino bién ese pequeño empujón.
Puede que me quedé mucho todavía por hacer, pero bueno, a sido un primer paso y también eso es importante.
Pasa un buén dia.

Datos personales

Seguidores